Australia: El RBA cumple expectativas y sube sus tasas de interés 50 puntos básicos hasta el 1.35%

En su reunión de política monetaria celebrada este martes 5 de julio, el Consejo de la Reserva del Banco de Australia (RBA) decidió aumentar el objetivo del tipo de interés efectivo en 50 puntos básicos, hasta el 1.35%, tal como se esperaba. También aumentó el tipo de interés de los saldos de liquidación de divisas en 50 puntos básicos, hasta el 1.25%.

Comunicado del RBA

La inflación global es alta. Está siendo impulsada por las interrupciones de las cadenas de suministro relacionadas con el COVID, la guerra en Ucrania y la fuerte demanda que está ejerciendo presión sobre la capacidad productiva. La política monetaria mundial está respondiendo a este aumento de la inflación, aunque todavía pasará algún tiempo antes de que la inflación vuelva al objetivo en la mayoría de los países.

La inflación en Australia también es alta, pero no tanto como en muchos otros países. Los factores mundiales explican gran parte del aumento de la inflación en Australia, pero también influyen los factores internos. La fuerte demanda, la rigidez del mercado laboral y las limitaciones de capacidad en algunos sectores contribuyen a la presión al alza de los precios. Las inundaciones también están afectando a algunos precios.

Se prevé que la inflación alcance su punto máximo a finales de este año y que vuelva a descender hacia la franja del 2-3% el año que viene. A medida que los problemas de la oferta mundial sigan disminuyendo y los precios de las materias primas se estabilicen, aunque sea en un nivel alto, se espera que la inflación se modere. La subida de los tipos de interés también contribuirá a establecer un equilibrio más sostenible entre la demanda y la oferta de bienes y servicios. Las expectativas de inflación a medio plazo siguen bien ancladas y es importante que así sea. El próximo mes se publicará un conjunto completo de previsiones actualizadas tras la publicación del IPC del trimestre que acaba en junio.

La economía australiana sigue siendo resistente y el mercado de trabajo está más tenso de lo que ha estado durante algún tiempo. La tasa de desempleo se mantuvo en el 3.9% en mayo, la más baja en casi 50 años. El subempleo también ha disminuido considerablemente. Tanto las ofertas de empleo como los anuncios de trabajo están en niveles muy altos y se espera un nuevo descenso del desempleo y el subempleo en los próximos meses. El programa de enlace con las empresas del Banco y las encuestas empresariales siguen apuntando a un aumento del crecimiento de los salarios desde las bajas tasas de los últimos años, ya que las empresas compiten por el personal en un mercado de trabajo ajustado.

Una fuente de incertidumbre permanente sobre las perspectivas económicas es el comportamiento del gasto de los hogares. Los últimos datos sobre el gasto han sido positivos, aunque los presupuestos de los hogares se ven presionados por la subida de los precios y de los tipos de interés. Los precios de la vivienda también han bajado en algunos mercados en los últimos meses, tras las grandes subidas de los últimos años. La tasa de ahorro de los hogares sigue siendo más alta que antes de la pandemia y muchos hogares han acumulado grandes reservas financieras y se están beneficiando de un mayor crecimiento de los ingresos. El Consejo prestará mucha atención a estas diversas influencias sobre el gasto de los hogares cuando evalúe la configuración adecuada de la política monetaria.

El Consejo también prestará mucha atención a las perspectivas mundiales, que siguen viéndose empañadas por la guerra en Ucrania y su efecto en los precios de la energía y las materias primas agrícolas. Los ingresos reales de los hogares están bajo presión en muchas economías y las condiciones financieras se están endureciendo, a medida que los bancos centrales aumentan los tipos de interés. También hay incertidumbres en curso relacionadas con el COVID, especialmente en China.

El aumento de los tipos de interés de hoy es un paso más en la retirada del apoyo monetario extraordinario que se puso en marcha para ayudar a asegurar la economía australiana contra los peores efectos posibles de la pandemia. La resistencia de la economía y la mayor inflación hacen que este apoyo extraordinario ya no sea necesario. El Consejo espera dar nuevos pasos en el proceso de normalización de las condiciones monetarias en Australia en los próximos meses. La magnitud y el calendario de las futuras subidas de los tipos de interés se guiarán por los datos que se reciban y por la evaluación que haga el Consejo de las perspectivas de la inflación y del mercado laboral. El Consejo se ha comprometido a hacer lo que sea necesario para garantizar que la inflación en Australia vuelva al objetivo con el tiempo.